jueves, 15 de noviembre de 2012

Pasan los días

Todo sigue bien por aquí!! Mucho frío, eso sí, aunque esta semana aún no ha llovido, lo que agradezco con toda mi alma. Y allí en Arabia mi padre POR FIN tiene wifi en casa, lo que significa que ya podemos mantener largas conversaciones sin miedo a las caras pixeladas y la voz entrecortada :)

Yo ya he confirmado que no tengo muchas opciones de encontrar academia antes de enero, porque los cursos intensivos son ultra caros (indignantemente caros!), así que nada, sigo encerrada cual estudiante responsable sobre mis libros y apuntes del Trabajo de Fin de Grado, que parece que poco a poco va cobrando vida... ahora sólo me falta que los queridos tutores den señales de vida desde Madrid, para que yo pueda respirar tranquila.

En la casa todo va progresando, me siento más cómoda. Pero, detalle gracioso, los tipos que curran aquí y que ahora están empezando a trabajar en el jardín (que es lo único que falta para terminar con la renovación)  se han percatado de mi existencia... y los desayunos se han convertido en un momento bastante extraño!! Porque las paredes de la cocina están llenas de ventanales que dan al jardín, y todo son comentarios en un español realmente divertido, Elena por aquí, Elena por allá... se ponen a cantar canciones de grupos en castellano y demás. Lo bueno es que me da menos vergüenza hablar en francés con ellos que con los padres, así que me voy soltando.

La verdad sea dicha, me cuesta tener que encerrarme voluntariamente y ponerme a trabajar. Por una parte está la nueva gente que estoy conociendo, con los que quisiera pasar bastante más tiempo, porque realmente se hace raro pasar tantas horas estudiando, o cuidando de las niñas, sin nadie adulto a mi alrededor. Además, aunque esta vida familiar es comodísima, y me permite practicar inglés&francés a partes iguales, me provoca un sentimiento de melancolía bastante importante. Pero cuento con un gran aliado, que es el tiempo que hace aquí: con este frío no apetece mucho estar por la calle (claro que los bares de Bruselas... a cuál más apetecible!!!), y además se hace de noche a las 5 y media, y a mí la oscuridad lo que me pide es manta y peli... parece que la edad de las fiestas sin fin ya terminó. ¿Será eso posible? (Realmente, los metros y tranvías circulan hasta la una, y vivo lejos del centro, así que tampoco es que pueda quedarme por ahí hasta altas horas de la madrugada... Ya iré viendo!!!!) Pero tengo claro que hasta marzo me toca currar; una vez que el trabajo esté presentado, seré mucho más libre.

Besos a todos!

No hay comentarios:

Publicar un comentario